miércoles, 30 de abril de 2008

EL CONTROL DE SÍ MISMO

El cuerpo humano es el carruaje; el yo, el hombre que lo conduce; el pensamiento son las riendas, y los sentimientos, los caballos. Esto ha dicho Platón.

A menudo, el dominio de uno mismo constituye un arte; le llamamos el Arte Real. Los antiguos denominaron así al arte de hacer del plomo oro puro, y los masones a la ciencia de convertir la pidra tosca en piedra cúbica. En ambos casos estamos ante símbolos que en verdad quieren decir que la condición grotesca y burda del hombre debe convertirse en un estado sublime y sutil, elevado y digno de su Creador.

El dominio de sí mismo no es cosa fácil. Un sector importante de la ciencia interior sostiene que la virtud es la fuerza que domina las pasiones y también afirma que el vicio es el hábito de contentar nuestros deseos. Tenemos pensamientos (riendas) y caballos (sentimientos) que el YO debiera conducir con templanza, sabiduría y equilibrio. Pero a menudo no es así; todo parece indicar que el hombre ha perdido la Palabra... Sin embargo, debe desarrollar su virtud, es decir, su fuerza interior para enfrentarse a otra fuerza, la del otro lado, aquélla fuerza que nos jala hacia el contento de los deseos y que, normalmente, nos lleva al borde de todos los precipicios, principalmente los de índole moral.

Sin embargo, el hombre no tiene la fuerza necesaria para controlarse a sí mismo como fuera de desearse; no al menos el hombre común, el hombre citadino. Quizá unos pocos, los verdaderos iniciados, sepan vivir consigo mismos, pero para ello parece ser indispensable que vivan apartados del mundo. No negamos que existan, pero de cerca no los vemos.

En El Colegio Invisible se aprende parte de esta ciencia de la sublimación de los metales y de las piedras. Una ciencia ciertamente en extinción, pero rescatable si uno la estudia y se va compenetrando gradualmente en ella. No es una ciencia que se aprenda de la noche a la mañana, pero tampoco es imposible de conocer y practicar. Hoy en día han despertado escuelas iniciáticas y otras que son modernas. La psicología y las terapias de moda parecen reconocer secretos milenarios que el hombre conoció a través de la inciación. Pero en las Logias masónicas se guardan en símbolos -para muchos irreconocibles- las enseñanzas de nuestros remotos antepasados. También en las asociaciones rosacruces, martinistas, gnósticas y de otra índole.

La Ciencia Secreta no se ha perdido; está ahí esperando ...

domingo, 13 de abril de 2008

ALMA MATER

Alma Máter es una frase clásica, muy latina que significa "madre nutricia", es decir, la madre que alimenta, y era usada entre los romanos para describir a la diosa madre y más tarde a la Virgen María.

Desde siempre había sido el lema de la Universidad de Bolonia, la más antigua del mundo y que habría sido fundada en 1088. La divisa pasó luego a las lenguas modernas como sinónimo de academia, para referir una comunidad de científicos. En el uso coloquial, sobre todo en español, la expresión Alma Mater se emplea para designar a las Universidades. Una Universidad es, por antonomasia, un Alma Mater.
Pero el alma mater es mucho más que una institución de educación superior; el alma es el corazón de los hombres y de ella se han dicho mil cosas. Por ejemplo:
Qué es el alma humana?
El alma es el principio espiritual que da vida al cuerpo y forma con él un ser humano.
¿Cómo se observa el alma?
El alma es espiritual y por tanto no puede observarse por los sentidos, sino por las acciones que realiza. Por ejemplo, reflexionar.
¿El alma es inmortal?
En El Colegio Invisible se enseña que el alma es inmortal por ser espiritual. Los seres materiales pueden aplastarse, pudrirse, dividirse en partes. En cambio, nada de esto afecta a los seres espirituales.
¿Cómo se sabe que el alma humana es espiritual?
El alma humana es espiritual porque realiza acciones espirituales; por ejemplo, entender esta web, donde se relacionan ideas (sin confundir ideas con imágenes, que son algo sensible).
¿Entonces las personas sin uso de razón no tienen alma?
Los bebés, algunos locos, los que duermen o están en coma tienen alma pues viven y son humanos. Pero en su caso la espiritualidad del alma no se manifiesta.
¿Qué sucede cuando un hombre muere?
En la vida el cuerpo humano se va deteriorando y llega un momento en que el alma es incapaz de mantenerlo vivo. Entonces llega la muerte: el cuerpo pasa a ser un cadáver y el alma va al cielo o al infierno (o temporalmente al purgatorio).
¿La espiritualidad e inmortalidad del alma son asunto de fe?
La fe ayuda a descubrir antes algunas realidades, pero la espiritualidad e inmortalidad del alma no se conocen sólo por la fe sino que basta la razón: si el hombre realiza acciones de tipo espiritual, es porque posee un principio espiritual que llamamos alma; y lo espiritual no puede morir como ya hemos comentado. En cambio, el cielo, infierno y purgatorio se conocen por la doctrina cristiana.
¿Cómo mejora el alma?
El cuerpo y el alma mejoran adquiriendo nuevas cualidades. El cuerpo progresa en capacidades materiales; el alma acrecienta sus cualidades espirituales. En ambos casos el avance se consigue mediante la repetición de buenos actos. Así, los hechos aislados se convierten en cualidades y se adquiere facilidad y soltura para continuar la línea de actuación.
¿Hay algún modo de que el alma mejore más rápido?
El alma avanza más rápidamente si Dios interviene con sus dones. Esto sudederá cuando Dios quiera, pero podemos acelerar el proceso si se lo pedimos con insistencia y procuramos agradarle con generosidad. Por otra parte, el alma recibe también gracias abundantes en los sacramentos.
¿Cómo empeora el alma?
El alma empeora de varios modos:
En el plano humano, el alma se empobrece cuando no se ejercitan sus facultades. La inteligencia y la voluntad necesitan de ejercicio para su desarrollo. En este sentido, la pereza y la dejadez causan mucho daño.
En el plano sobrenatural, el daño mayor para el alma lo produce el pecado. La unión con Dios y la recepción de gracias o dones divinos es lo que más beneficia al alma. Por esto, el pecado es lo que más perjudica, pues cualquier pecado debilita la unión con Dios.
Humana y sobrenaturalmente, el alma empeora con la repetición de actos malos, que la transforman en un alma viciosa, más inclinada al mal.
Los Maestros de El Colegio Invisible consideran que la Maestría es el conocimiento de La Acacia.

ESPIRITUALIDAD PAGANA

Por Nathair Aosda

Rotundamente, si. Y no solo ha de existir, si no que es necesaria.
La sociedad en la que vivimos, trabajamos y nos relacionamos ha ido degenerando lentamente. No tan solo se han perdido valores humanos de gran importancia, tales como solidaridad, honor, compañerismo, misericordia, humildad…. sino que se ha perdido el espíritu de unidad con el resto de entidades vivas de este planeta, tanto humanos como animales, vegetales y minerales.
Por algún motivo que no alcanzo a comprender, el ser humano se ha separado voluntariamente de la Naturaleza, sometiéndola y explotándola en beneficio propio de forma salvaje y egoísta. Cada día se extinguen especies valiosas por el abuso de los seres humanos, especies que no podrán ser recuperadas y que hacen que nuestro precioso mundo azul sea un poco más oscuro. Se siguen lanzando a la atmósfera millones de metros cúbicos de gases contaminantes, volviendo el aire irrespirable. Las fábricas lanzan sus vertidos a los ríos y mares, envenenándolos y provocando la muerte de los seres que habitan sus aguas. Las empresas mineras remueven toneladas de tierra para encontrar gemas, cristales y minerales semipreciosos en países subdesarrollados, dado que el interés en dichos seres minerales ha aumentado en los últimos años por un auge de la “moda new age”, esquilmando las riquezas de países de África, o de zonas como Brasil, ya castigadas por la tala indiscriminada de árboles en el Amazonas. Los tres elementos Druídicos están contaminados, y tan solo parece permanecer impasible el Fuego transmutador….
Los animales salvajes son arrinconados en esas reservas llamadas Parques Nacionales, donde viven en libertad aunque con movilidad limitada. Otros no tienen tanta suerte y acaban sirviendo como símbolo de estatus de alguna acomodada Señora. En cuanto a los animales domésticos, pocos son los que tienen calidad de vida, ya que la mayoría acaban enfermando por “humanizarse” (hay muchos casos de stress en los animales que viven en las ciudades) o abandonados cuando dejan de ser el juguete de la casa. En cuanto a los animales de consumo humano, se encuentran encerrados en espacios pequeños, con poca o ninguna movilidad, con luz artificial las 24 horas, comiendo continuamente, en lo que serian unos auténticos campos de exterminio….
El respeto por la Naturaleza, así como el contacto e intercambio tanto energético como emocional con el resto de formas de vida que conforman nuestro planeta, es una garantía de su continuidad. Como Paganos, como Celtas que respetamos y veneramos la Tierra, es nuestra obligación instruir a las nuevas generaciones en el respeto y el conocimiento de la Naturaleza. Conocer es amar, y por desgracia en nuestra sociedad el estudio de la Naturaleza no pasa más que de puntillas por las aulas de nuestros colegios. Como padres Paganos, es nuestro deber instruir a nuestros pequeños, con la ayuda del resto del Clan, en las leyes de la Naturaleza, su conocimiento y su aprovechamiento racional. Debemos enseñarles a través de nuestro comportamiento, como respetar la Naturaleza, como evitar contaminarla, como reciclar y, con el consejo de nuestros hermanos más sabios, instruirles en las costumbres de los animales, en las antiguas leyendas que elogian aquellos valores humanos ya perdidas en nuestra sociedad.
Como Paganos, como Celtas y como seguidores Druídicos tenemos la labor de procurar que las nuevas generaciones se involucren en la defensa y en el conocimiento de la Naturaleza. Para ello, el Clan se ha de involucrar también en ayudar en la educación a nuestros niños, tal y como hacían los antiguos Celtas.
De la enseñanza de nuestra Espiritualidad y nuestros principios Paganos y Celtas a nuestros niños, nacerá la esperanza de una continuidad en la lucha por proteger a la Naturaleza y a sus habitantes.
Yo tengo fe en ello.
En El Colegio Invisible, hemos tenido fe en ello desde hace siglos...